Llego semana santa, unos creen otros no creen, es cuestión de creencias. Yo no pondré en la palestra mis creencias solo diré que respeto todas las creencias, costumbres, formas de vida y como uno tenga ganas de vivir su vida. Muchas barbaridades circulan hoy por la redes, y respeto es lo que menos abunda. Hay mucha hipocresía y poca cordura, hay gentes que piensan por si solas –muy pocas- , gentes robotizadas que no le interesa pensar y gentes entrenadas, mentalizas y adiestradas por ideas radicales que no solo no piensan con su cabeza, también son capaces de tratar de imponer esas ideas a ultranza y que generalmente usan métodos y formas totalmente contrarios a lo que su propia doctrina dice. Ellos van por el mundo pregonando los beneficios de su democracia, de sus ideas, de sus puertas abiertas a todas las creencias y costumbres pero también son capaces de desautorizar, maldecir y odiar todo lo que este en contra de sus credos. Creo que de esos el mundo esta lleno y son los más peligrosos para las sociedades.
De pequeño las navidades y la pascua las vivía a pleno, un hoy no fui capaz de descifrar cuales eran las razones que hacían que uno entrara en un estado de paz y sentimientos tan especiales. Ya no se si me dará el tiempo pero seguiré pensando, en que es lo que sucede en nuestras mentes cuando llegan esos días tan especiales, sea en la religión que sea, o si adora al sol o a los árboles, todas esas ceremonias alteran nuestros sentidos rutinarios y nos predisponen de otra manera para esos rituales.
Creo que esa duda a lo desconocido, a lo misterioso lo cultivamos todos hasta los mas ateos, lo que pasa es que unos lo admitimos y otros lo niegan pese a que sea todo lo contrario a su razonamiento pues siempre en su cerebro existirá un lugar donde se preguntaran será cierto o no será cierto.
Como ya dije recuerdo con cariño aquellos días, pese a que mis pensamientos cambiaron y no crea en algunas cosas de todas maneras respeto esos pensamientos y modos de vida y me delito recordando aquellos días de mili cuando con mi amigo San Miguel de Peñacastillo fuimos a desde de Almería hasta Málaga para ver desembarcar a los legionarios y posteriormente aplaudirlos cuando trasladaban al Cristo de Mena.
Queda a criterio de cada uno que haga lo que y piense y que respete lo que los demás crean la palabras “RESPETO Y TOLERANCIA” son la clave.
Jesús A. López.